Flores es el único barrio porteño que tiene un museo propio. Pero estuvo a punto de cerrar. Como en todos los rubros, la pandemia por el coronavirus golpeó fuerte a un espacio que tuvo que mantenerse sin funcionar desde marzo y hasta noviembre por la cuarentena y el aislamiento. Pero la ayuda de los vecinos y el empuje de los fundadores lo mantuvieron abierto, aunque debieron mudarse de espacio.
Este sábado reabre en su nueva sede, en la calle Ramón Falcón 2207, esquina Bonorino. A unas cuadras de donde estuvo hasta ahora.
«Al no tener ningún aporte estatal se nos complicó mucho continuar. En su momento nos comunicamos con los ministerios de Cultura y Educación. Tuvimos que suspender los cursos que teníamos previstos. Este es un museo hecho por los vecinos, que fueron también los que aportaron para que pudiéramos abrir. Y con la ayuda de ellos resistimos todo este tiempo. La mudanza fue la manera de continuar, porque ya no podíamos sostener el otro alquiler», le contó Roberto D’Anna, uno de los fundadores, a Clarín.
Con él trabajan Juan y Mariana, los dos pilares que lo sostuvieron en los peores momentos. Y además de los vecinos anónimos, también están los famosos, que apoyan con la difusión de mensajes a través de las redes sociales. Es el caso de la actriz Anita Martínez, el cantante Nito Mestre.
El museo del barrio de Flores, el único en su tipo en la Ciudad, reabrió en un nuevo espacio por la pandemia
«Es el primer museo que resume la historia de un barrio de la Ciudad de Buenos Aires. Es pionero en la exposición permanente de una sala sobre el Papa Francisco, vecino ilustre del barrio, y presenta otro espacio con obras originales del escritor Cesar Aira, vecino del barrio, candidato a premio Nobel de Literatura y con más de 100 obras publicadas en 20 países», dice el fundador, que es coleccionista y además fundó hace más de 20 el diario del barrio. Flores de Papel, que se mantiene con ediciones digitales e impresas.
Otro de los espacios el dedicado al ex combatiente de Malvinas Fabián Volonté, quién donó parte de sus pertenencias para contar su historia. El también vive y trabaja en Flores, en donde tiene el Taller del ex Combatiente de Puerto Argentino.
Y en la reapertura habrá otra novedad. Será, desde este sábado, el sector dedicado a Laura Urteaga, campeona argentina de triatlón y entrenadora fundadora del grupo de entrenamiento La Deportista. Urteaga, una referente del triatlón nacional y del running en los últimos años, también fue vecina del barrio y por eso el museo la recuerda con una de sus bicicletas y otros elementos, como el trofeo que obtuvo al cruzar nadando el lago Nahuel Huapi, en Bariloche, Río Negro.
El museo del barrio de Flores, el único en su tipo en la Ciudad, reabrió en un nuevo espacio por la pandemia. Tiene un sector dedicado a la deportista Laura Urteaga, campeona argentina de triatlón y vecina del barrio.
La atleta murió a principios de este 2020, tras haber peleado durante más de ocho años contra un cáncer que no le impidió seguir entrenando y encarando desafíos. Justo este sábado Laura Urteaga habría cumplido 47 años.
En los distintos espacios se exhiben 4.000 objetos. La anterior sede, una casona que perteneció al Jefe de la Policía de Bomberos durante la presidencia de Hipólito Yrigoyen, había seis salas temáticas que se reconvirtieron ahora en espacios en los que también hay lugar para obras de artistas del barrio y curiosidades imperdibles. La entrada es libre y gratuita y abre de 11 a 20.
Roberto D’Anna, fundador del museo del barrio de Flores, el único en su tipo en la Ciudad, reabrió en un nuevo espacio por la pandemia
Flores fue uno de los barrios porteños más afectados por el coronavirus. También recibió el golpe del dengue. Y desde el museo, con la ayuda de los vecinos, se motorizaron acciones solidarias para colaboraron con quienes perdieron el trabajo o emprendieron nuevas actividades.
Fuente: Clarín