En un artículo publicado en el diario El País, en el cual trabaja desde 1990, Montañés Bermúdez evoca la disparidad entre la vida mediática de la pareja Dalí con su intimidad y el poco conocimiento sobre la relación con el joven Joan, quien a sus 5 años fue modelo del pintor y convivió por temporadas con la pareja en Port Lligat (Cadaqués, Cataluña), estableciéndose un vínculo «familiar» muy estrecho hasta la muerte de Gala en 1982 y la reclusión del pintor en el Castillo de Púbol.
La pareja no tuvo hijos. A partir del regreso a España en 1948 tras pasar diez años en Estados Unidos -ya finalizada la Guerra Civil-, pasaba la temporada de verano en Port Ligat, donde tenían una casa y en invierno viajaban a Nueva York para vender las obras producidas por el pintor.
Cuenta el autor del libro que Dalí, renegando del surrealismo, inició una etapa místico-religiosa a su regreso, y para su obra «La Madona de Portlligat» necesitó un niño de modelo.
A su vez destaca que la «fama de fríos, distantes, poco afectuosos e, incluso, de odiar a los niños, que siempre ha acompañado a Dalí y Gala» se contrapone a la relación con Figueras, fallecido en 1999, diez años después de la muerte del artista.
Si bien la historia íntima sobre «el nen de can Dalí» no trascendió a los medios, es reconstruida por el también historiador con el material fotográfico de la intimidad del hogar, además de las entrevistas a quienes los conocieron en Cadaqués.
El libro de 352 páginas sale a la venta a principios de noviembre por Roca Editorial y se encuentra disponible su preventa en España.
Fuente: Télam