Las subastas son un hit de la cuarentena.En lo que va del aislamiento, crecieron un 15% en el país, con preponderancia del formato virtual, de acuerdo a la casa de remates Narvaezbid.
Pero el fenómeno no se reduce únicamente a la Argentina. Hace unas semanas, en los Estados Unidos, se subastó una colección de autos clásicos compuesta por 240 unidades desde 1905 hasta la actualidad, en un evento inédito por el volumen y la calidad del lote, valuado en más de u$s 31 millones.
El próximo sábado, desde las 9 hasta las 14 horas, saldrán a remate en ese mismo país tres modelos únicos. Se trata de réplicas de vehículos que se utilizaron en el rodaje de famosas películas que se llevaron a la pantalla grande años atrás. Habrá también modelos BMW, Honda, Jeep y Nissan.
El remate lo realizará Skipco Auto Auction, la principal casa de subastas públicas de automóviles del estado de Ohio desde 1978. Su oferta incluye autos, camiones, motos y vehículos todo terreno recuperados de causas asociadas a lavado de dinero.
Se llevará a cabo de manera presencial y solo podrán ingresar 120 personas, para así cumplir con el distanciamiento social por el Covid-19, aunque también se podrá seguir en vivo y ofertar de manera virtual. A los concurrentes, se los obligará a usar tapabocas y, previamente, deberán registrarse en el sitio web de Skipco antes del viernes para recibir un código que les permitirá participar.
La firma no reveló el precio base de los vehículos. Uno de ellos es un DeLorean DMC-12 de 1981. El modelo se volvió popular por su participación en la trilogía «Volver al Futuro». En los filmes de ciencia ficción, Michael J. Fox interpreta a un adolescente californiano que viaja a los años ’50 usando un DeLorean como una «máquina del tiempo», creación de su amigo científico, interpretado por Christopher Lloyd.
Este DMC-12 de dos puertas posee un motor V6 gasolero de 2.9 litros, con 29.561 kilómetros. Su interior fue aggiornado con elementos icónicos de las películas, como relojes del tiempo, propulsores montados en la parte trasera y cableado exterior.
Tres de los siete autos empleados en las cintas sobrevivieron luego de la filmación. Uno se vendió por u$s 541.000 en 2011 y parte de los ingresos de la subasta se donaron a la Fundación Michael J. Fox para la Investigación del Parkinson, luego de que la celebridad anunciara que padecía la enfermedad en 1998.
Otra de las «joyas» que se subastará es un Chevrolet Caprice Classic de 1995, el «Batimóvil» que aparece en dos largometrajes de «Batman», dirigidos por Tim Burton y protagonizados por Michael Keaton en 1989 y 1992 («Batman» y «Batman Vuelve»). Utilizado como medio de transporte diario por el héroe como así también en las escenas de aventura, apareció por primera vez en el cómic en 1939.
El motor V8 de 5.7 litros funciona con gasolina. Los detalles de la réplica lo hacen casi idéntico al de las películas, tanto por dentro como por fuera. Trae el logo de «Batman» en el volante y en la rueda.
El último es un ECTO-1 de 1959, famoso Cadillac por «Los Cazafantasmas», protagonizada por Bill Murray, Dan Aykroyd y Harold Ramis como un grupo de expertos en actividad paranormal.
El trío se embarca en la captura de fantasmas y salva a la ciudad de Nueva York de los «espíritus dominantes» en esa historia de 1984. El auto original se vendió por u$s 80.000 en una subasta en el estado de Arizona en 2010.
En este caso, no se especificaron sus características técnicas, pero sí su kilometraje (67.467 kilómetros) y detalles de su interior y exterior: sus asientos son de cuero blanco, viene con una alfombra roja y se colocaron luces de emergencia en el techo y una escalera que cuelga por el costado, además del logo de la banda.
Los autos fueron incautados por la Justicia, según reveló el medio estadounidense especializado CarSales. El Servicio de Alguaciles confiscó los vehículos luego de que el año pasado Ryan P. Sheridan fue sentenciado a siete años y medio de prisión por su participación en un caso de fraude criminal por u$s 48 millones.
Sheridan era propietario de Braking Point Recovery Center, un centro de rehabilitación para adictos a las drogas y el alcohol, en Ohio. Recibió u$s 31 millones por servicios que, según los fiscales que llevaron a cabo la investigación, no se proporcionaron, ya que no eran necesarios.
Así son los autos que se rematan
Luego de que Sheridan se declarara culpable, se lo obligó a pagar u$s 35 millones en restitución yse emitió una orden que instó a las autoridades locales a incautar los vehículos.
Fuente: El Cronista