«Ahora debemos cumplir la promesa de Estados Unidos al confiar en Dios, unificar nuestra visión y construir nuestro futuro. Me postulo para presidente de los Estados Unidos», publicó anoche West en su cuenta de Twitter, donde tiene 29 millones de seguidores.
Si bien no hay una fecha límite para presentar una candidatura presidencial, el plazo para registrar las adhesiones ya pasó en varios estados.
Pese a apoyar a Trump, a quien visitó en la Casa Blanca en 2018 junto con su esposa, Kim Kardashian West, el rapero busca presentarse como independiente.
En esa reunión, West pronunció un discurso laberíntico y cargado de blasfemias en el que discutió universos alternativos y su diagnóstico de trastorno bipolar, que, según dijo, en realidad se debía a una privación del sueño.
A cuatro meses de las elecciones, no está claro si West ya presentó los documentos oficiales necesarios para aparecer en las boletas electorales estatales en noviembre próximo, informó la agencia de noticias Europa Press.
Hay quienes consideran que su candidatura es una estrategia para quitarle votos al exvicepresidente de Barack Obama, Joe Biden.
Josh Marshall, fundador del sitio web político Talking Points Memo, calificó el movimiento de West como un «truco» que es «parte de un acuerdo con Trump», informó la agencia de noticias Al Jazeera.
Además, no se descarta que sea todo una campaña publicitaria ya que el anuncio de su candidatura llegó días después de que publicara una nueva canción, Wash Us In the Blood (Lavarnos en la sangre), junto a un video en el que se ven imágenes de las recientes protestas antirracistas, que terminaron siendo abiertamente opositoras al presidente.
West cuenta con el apoyo de Elon Musk, director ejecutivo del fabricante de automóviles eléctricos Tesla y otra celebridad conocida por sus arrebatos excéntricos y su apoyo un poco más moderado al Partido Republicano, quien publicó en la misma red social: «¡Tienes todo mi apoyo!».