El museo más visitado del mundo había cerrado por decisión de sus empleados, quienes reunidos en asamblea habían expresado su temor a contagiarse el nuevo coronavirus que surgió en la ciudad china de Wuhan, desde donde se expandió a 81 países hasta el momento con 94.209 casos detectados en todo el mundo.
Hoy, a pesar de reconocer las «preocupaciones legítimas» de los empleados, la administración del museo explicó que la «máxima prioridad» es «garantizar la seguridad del personal y de los visitantes», informó la dirección del museo, según ANSA.
Y subrayó que las autoridades competentes de Francia «ahora recomiendan la reapertura de los museos».