Billie Eilish no sólo es una chica con el pelo pintado de verde flúo y las uñas más largas que las de Morticia: es la cantante pop más importante del momento.
Podría decirse que terminó por consagrarse el 25 de enero de este año, en la entrega de los premios Grammy. Esa noche, con apenas 18 años, Billie se convirtió en la primera mujer en ganar el gran poker de galardones (álbum del año, grabación del año, canción del año y mejor nuevo artista) y, además, fue la más joven en lograrlo. Lo que se dice, puro talento precoz.
Su éxito se basó en Bad Guy, esa canción palpitante, que suena como un hermoso corazón desbocado y habla de que a veces las chicas pueden ser el “chico malo”, y en su álbum debut, When We Fall Asleep, Where Do We Go? (algo así como «Cuando estamos todos dormidos, ¿dónde vamos?»(
Pocos días después, el 9 de febrero, en el no menos glamoroso Teatro Dolby de Los Angeles, se lució en la entrega de los premios Oscar interpretando una conmovedora versión de Yesterday, el clásico de Los Beatles. Y hace dos semanas, en Londres, fue elegida “mejor artista femenina internacional” en los Brit Awards. Definitivamente imparable.
Billie Eilish posa con su hermano Finneas O’Connel tras haber ganado cinco premios Grammy. No se puede pensar a uno sin el otro. Foto: EFE/David Swanson
Billie Eilish, que en realidad se llama Billie Eilish Pirate Baird O’Connell, nació en Los Angeles el 18 de diciembre de 2001.
Se crió en el barrio de Highland Park en una familia, como se dice, “de artistas”. Su padre es el músico y guionista Patrick O’Connell, y su madre, la actriz Maggie Baird.
Billie no fue a la escuela: se educó en su casa. Y a los ocho años se sumó al Coro Infantil de Los Angeles. Al mismo tiempo empezó a tocar el piano y el ukelele. En la composición de sus canciones la acompaña su hermano mayor, Finneas, que además es su productor. Es imposible pensar a uno sin el otro.
Inquieta, melancólica, sus temas surgen “tanto de experiencias propias como de ficticias”.
«Mis mayores composiciones han sido sobre un chico que me destrozó por completo. Era terrible. Y me trató muy mal. He escrito muchas canciones sobre él», reconoció Billie, todavía apenada por esa experiencia.
Los gustos musicales de Billie son amplios, variados: va del hip hop al rhythm and blues. Y no sólo admira a Los Beatles: también reconoce como influencias a Greenday, Avril Lavigne y Lana del Rey.
Billie, con su look de ropas holgadas, junto a su hermano Finneas.
Billie saltó a los primeros planos gracias al simple Ocean Eyes, que se publicó en 2015 en la plataforma Soundcloud. Tenía 13 años.
“Para una coreografía con música original”, la canción se la había pedido uno de sus profesores de baile. Fue un éxito, un verdadero fenómeno viral, de esos hits que se escuchan aquí, allá y en todas partes. En su primer año sumó más de dos millones de reproducciones en Spotify.
Así, la artista creó su propio canal en Youtube, donde subió un video y la coreografía que ella misma había armado. Después de firmar un contrato con Interscope Records, el tema se lanzó oficialmente y recibió muy buenas comentarios de la crítica.
Luego, Eilish publicó su segundo tema, Bellyache, en febrero de 2017. Y los éxitos se sucedieron: llegó Bored, y Watch, y Copycat. Siempre tierna, oscura, al borde del precipicio.
Los seguidores se multiplicaban. Entonces, Billie organizó dos giras por los Estados Unidos y empezó a codearse con artistas más curtidos: fue telonera de Florence and the Machine, la banda británica de indie rock liderada por Florence Welch.
El primer álbum de estudio de Billie se llamó When We All Fall Asleep, Where Do We Go?y salió a la venta en 2019. Los hermanos Eilish lo grabaron en su casa porque alquilar una sala era “demasiado caro” y “faltaba luz natural”.
Ese mismo año, la cantante compuso un tema, When I Was Older, inspirado en la película Roma, de Alfonso Cuarón, el filme en blanco y negro que ganó tres premios Oscar.
A la hora de analizar las virtudes de Billie, las plumas especializadas en música coinciden: la artista “disolvió por completo los géneros en plena globalización y atravesó la línea entre lo independiente y lo comercial, después de que Internet universalizara el acceso a la música”.
Billie no se detiene. Acaba de lanzar No Time To Die, la canción para la nueva película de James Bond, que en la Argentina se estrenará en abril. Y antes de eso, el 9 de marzo, en Miami, empezará su gira Where Do We Go?: World Tour.
Como parte de ese recorrido, está previsto que se presente el 2 y 3 de junio en nuestro país. Será un año cargado, intenso: su agenda tiene fechas programadas hasta el 7 de septiembre en Indonesia.
Claro: no todo es éxito en la vida de Billie. En una entrevista con la revista Rolling Stone, contó que se deprimió cuando dejó de bailar, a los 13 años, por una lesión en su cadera.
Y este año, en una charla con Ellen Degeneres, presentadora estadounidense, reconoció que, “desde chica”, sufre el síndrome de Tourette, una enfermedad que la lleva a realizar sonidos y gestos involuntarios.
“Billie Eilish es el ícono pop que define la ansiedad adolescente en el siglo XXI”, la definió el diario The Guardian.
Un ícono, sería, con actitudes poco comunes. Alguien que no puede disimular su timidez cuando le sacan fotos o la entrevistan. Alguien que se viste con ropa ancha -podría definirse como el “look bolsa”- para evitar que los demás opinen sobre su cuerpo, si le sobra o le falta ingerir milanesas a caballo. Alguien que se brota cuando la copian. “Por favor, dejá de hacer esta mierda”, escribió Eilish, a modo de denuncia, en sus historias de Instagram. Se refería a una joven que había aparecido en las redes sociales imitándola.
Y agregó: “Me hacés quedar mal”.
Hay más: en otro mano a mano, en este caso con la periodista estadounidense Gayle King, Billie confesó que el año pasado estuvo a punto de suicidarse en Berlín, Alemania.
“Recuerdo que en mi habitación de hotel había una ventana. Y yo… ¡Dios! Recuerdo estar llorando mientras pensaba que la forma en la que iba a morir era haciéndolo por mi propia mano… Era infeliz. Era muy infeliz y estaba muy triste”, relató.
Billie logró mejorar su estado de ánimo, como lo contó ella misma, “gracias al apoyo de muchos de mis fans”.
Por eso, como devolución de gentilezas, ella también se encarga de contener a quienes sufren. “Los agarro por los hombros y les digo: ‘Por favor, cuidate, sé bueno y amable con vos mismo. No des ese paso extra que hará que te hagas más daño y no puedas volver nunca más atrás’”.
Hoy por vos, mañana por mí.
La oscura versión de Yesterday en los Oscar
El 9 de febrero de 2020, en la ceremonia de entrega de los premios Oscar, Billie Eilish interpretó Yesterday, de Los Beatles, junto a su hermano Finneas.
Lo hizo como parte del In Memoriam, el homenaje que la Academia del Cine les dedicó a los artistas que fallecieron en el último año.
Mientras los Eilish estaban en el escenario, en la pantalla gigante del Teatro Dolby empezaron a aparecer diferentes personalidades.
La primera imagen que se vio fue la de Kobe Bryant, quien murió el 26 de enero en un accidente de helicóptero.
Billie, durante el homenaje a los muertos en los Premios Oscar.
La leyenda de la NBA había ganado en 2018 el Oscar al mejor corto de animación por Dear Basketball, basado en un texto con el que se despidió de su carrera como jugador.
Entre otros, también se homenajeó a David Foster, Bibi Andersson, Doris Day y Kirk Douglas.
Además del de Billie, en la gran noche de los Oscar hubo otros shows musicales, como el de Chrissy Metz, Cynthia Erivo, Eminem y Elton John.
Fiel a su estilo, Eilish no quedó conforme con su performance en el corazón de Hollywood. «Los Oscar no son mi gente… No estoy acostumbrada…», comentó.
Y siguió: «Al menos en los Grammy no estaba asustada porque eran artistas, era mi gente. Los conocía a casi todos y ellos a mí. Hay una gran diferencia entre estar sentada en una habitación rodeada por tus amigos y compañeros músicos que estar rodeada de personas que usualmente sólo vez en el cine, los Oscar… Me refiero a, ¡son estrellas de cine! Fue completamente diferente, el show fue espantoso, estaba asustada”.
Algunos números del boom
–18 años. La edad de Billie Eilish.
–6: Las nominaciones que tuvo este año en los premios Grammy. Ganó cinco, los cuatro más importantes y el de “mejor álbum de pop vocal”.
-Más de mil millones de reproducciones: las de la canción Bad Guy en Spotify.
-Más de 200 millones de reproducciones: las del tema Ocean Eyes en Youtube.
–1°: con When We All Fall Asleep, Where Do We Go?, fue la primera artista nacida en la década de 2000 en tener un álbum número uno en los Estados Unidos.
Fuente: Clarín