Se impone el río. Y con ese manto marrón sobre el que el sol de la tarde «enciende» chispas plateadas, sobra para quedarse sentado a la mesita de un drugstore. Refresca.
Sin embargo, Puerto Madero, barrio porteño fundado en los años 90, tiene atractivos diversos. Y aunque se lo asocie con opulencia y poder, con los viejos silos y las torres nuevas, no todo es lujo en el sentido tradicional. Menos, si se lo recorre como un paseo de esculturas a cielo abierto.
Celebrity. La «Fuente de las Nereidas», que creó Lola Mora. Fue inaugurada en 1903. / Archivo Clarín
En cuestión de arte la zona expone celebridades. El mayor ejemplo es la Fuente de las Nereidas, creada por Lola Mora e inaugurada en 1903, es una de las obras más bellas de toda la Ciudad de Buenos Aires. Es cierto que se encuentra en la actual calle Tristán Achával Rodríguez al 1400, a metros de uno de los ingresos a la Reserva Ecológica, porque no quisieron colocar esos cuerpos desnudos, sensuales, esculpidos por una mujer y donados por ella, cerca de la Catedral, en el Centro, y la mudaron. Pero hace rato que esa representación del nacimiento de Venus rodeada por nereidas -para los antiguos griegos, ninfas protectoras de marineros- y por tritones, hecha en mármoles y de otras piedras con un mix de naturalismo renacentista y exuberancia barroca perfecto, figura -y con razón- en todas las guías de turismo de Capital.
Y en cuestión de arte Puerto Madero expone también con otras piezas poco conocidas, podría decirse, «secretas«.
Camuflado. Un fragmento del Monumento a Alberdi, que creaba Alfredo Bigatti en 1939. /Maxi Failla
Puerto Madero exhibe, por ejemplo, Las Bases (1939), una columna con representaciones de ideas clave de Juan Bautista Alberdi plasmadas en la Constitución Nacional, y un León de San Marcos (2001), donado por la ciudad Venecia. Y exhibe Ana Frank (2014), una representación de la chica que escribió un Diario durante el Holocausto, en Holanda, antes de que la mataran, a los 15 años, en un campo de concentración nazi. Se trata de una réplica de la pieza que está en Amsterdam, donde ella vivió, realizada por la artista Jet Schepp, que la muestra cuando va, con su portafolios y una bolsita, a tratar de esconderse.
Inauguración. El homenaje a Ana Frank fue emplazado en Puerto Madero en 2014, como símbolo de la memoria. / Archivo Clarín
Guardacostas. Así se titula esta escultura, que homenajea a prefectos caídos en Malvinas. / Maxi Failla
Hay variedad en estas calles. Y tal vez sean otros trabajos, que apuntan a la cultura popular porteña, como el fuelle gigante, Monumento al Tango (2007) o el que homenajea Al Taxista (2012), los que le suman a Puerto Madero cierto aire de barrio.
Ofrenda. Las figuras de la Antena Monumental, donada por la colectividad italiana en 1927. / Maxi Failla
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No es que falten museos en Puerto Madero. Está el del Humor en la antigua sede de la Cervecería Munich, construida en 1927 por el húngaro Andrés Kálnay, con influencias imperiales europeas y Art Déco. La Colección Fortabat. El Pabellón de Bellas Artes e la UCA. El De la Cárcova. Y el arte sigue llegando: con obras de Gachi Hasper, Eugenio Cuttica, Fabián Burgos, Graciela Sacco, Marie Orenzanz, Diana Cabeza y Nicola Costantino -las últimas tres premiadas en un certamen organizado por Related Group- anunciaron que se viene unpaseo de artistas mujeres en el patio del edificio SLS Lux, en Pierina Dealessi al 1700.
León. Donado por Venecia, en 2001. / Maxi Failla
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Tampoco faltan paseos formales, en la Costanera Sur, como el De la Gloria (dedicado a deportistas). Ni falta vandalismo. Pero la colección callejera de Puerto Madero es variada -en estilos y calidad artítica- y aparece como una buena respuesta a qué hacer este fin de semana en Buenos Aires. Gratis.
Es cierto que sábados y domingos el barrio recibe multitudes. Pero no cuesta mucho desconectarse. Se impone el río y quizá, el arte.
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Las 7 obras elegidas:
1) Las Bases. Este altorrelieve muestra escenas que representan ideas de Juan Bautista Alberdi plasmadas en la Constitución Nacional. La pieza era parte del proyecto de Monumento a, justamente Alberdi, de 1939. Fue donada por la familia del escultor Alfredo Bigatti a la corporación Antiguo Puerto Madero. En Azucena Villaflor y Olga Cossettini.
Detalle. Representaciones de la ideas de Alberdi para la Constitución. / Maxi Failla
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2) León de San Marcos. De cemento y mármol, y de autor desconocido -según indica el investigador Nicolás Gutiérrez en el libro «Mármol y Bronce. Esculturas de la Ciudad de Buenos Aires»-, la pieza fue donada por la ciudad de Venecia en 2001. Reproduce una columna de la Plaza San Marcos, llevada allí desde Constantinopla en el siglo XIII. En el tope, está la síntesis de todo: una reproducción del león alado, símbolo de San Marcos y de la propia Venecia. En Avenida de los Italianos y Machaca Güemes.
Zoom. Sobre el León de San Marcos, donado por Venecia. /Maxi Faillai
3) Ana Frank. Esta es la representación de la chica que escribió en un diario personal durante el Holocausto en Holanda, antes de que la mataran, a los 15 años, en un campo de concentración nazi. Se trata de una réplica de la pieza que está en Amsterdam, donde ella vivió, realizada por la artista Jet Schepp. Su diario, que su padre dio a conocer al mundo, se tradujo a más de 80 lenguas. Es un símbolo de la memoria y del horror nazi. La obra original se encuentra en el barrio de Merwedeplein, donde la familia Frank vivió. Esta, en Plaza Reina de Holanda.
Ana Frank. Fue asesinada a los 15 años en un campo de concentración nazi. / Maxi Failla
Schepp contó a Clarín que eligió la página del Diario donde Ana describe su caminata al escondite de la calle Prinsengracht. “Ella sabía que iba a esconderse pero no dónde. Ana describe cómo debía vestir: prenda sobre prenda, aunque hacía mucho calor, y sólo podía cargar una bolsa de compras y su portafolios del colegio para no levantar sospechas”. Más de la entrevista, acá.
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4) Al taxista. Este trabajo, de tamaño natural, fue creado por Fernando Pugliese en cemento patinado -resistente a todo clima-, evoca el dorado del bronce- e inaugurado en 2012. Lo donó a la Ciudad de Buenos Aires el Sindicato de Peones de Taxis. Después de verlo completo, vale la pena enfocar en los detalles. El chofer tiene el codo apoyado en un Siam Di Tella 1500, modelo típico de los ’60 y principios de los ’70, que usó -al principio- «Rolando Rivas, taxista«, personaje interpretado por Claudio García Satur en la telenovela (1972/3) de Alberto Migré. Tal vez sea por su pose entre orgullosa y relajada, canchera, que es tan porteño. Casi un tango. En Avenida de los Italianos y Macacha Güemes.
Como Rolando Rivas. El homenaje al taxista, de 2012. / Maxi FaillM
5) Antena Monumental. El mástil mide unos 40 metros de alto. Se apoya sobre una base escalonada de mármol en la que se ubica un grupo de esculturas que representan la idea de ofrenda. Y lo corona un yelmo de hierro con pátina dorada.
Base. De la Antena Monumental, de 1927. / Maxi Failla
La pieza fue realizada por el arquitecto Gaetano Moretti y el escultor Giannino Castiglioni, en bronce, e inaugurada en 1927. La donó la colectividad italiana para conmemorar la visita al país del príncipe Humberto de Savoya en 1924. En Avenida de los Italianos s/n.
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6) Virulazo. Este fuelle de acero mide 3,5 metros de altura (más un pie de 1,7) y pesa 2 toneladas. Sin embargo, parece ágil. Alude al bandoneón, cierto. Pero por los pliegues y repliegues, por el movimiento sugerido, también lo llaman como al bailarín Jorge Orcaizaguirre (1926-90): Virulazo. Se trata, en realidad, del Monumento al Tango realizado por la escultora Estela Trebino y el ingeniero Alejandro Coria e inaugurado el 22 de noviembre, Día de la Música, de 2007. Un trabajo pionero en Capital, que se replicó en Brasil y Francia, entre otros países. En Avenida de los Italianos y Azucena Villaflor.
Al tango. Un fuelle de 2 toneladas, también llamado «Virulazo». / Maxi Failla
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7) Guardacostas. La base evoca a la lancha Río Iguazú, que participó en la guerra de Malvinas. La figura femenina representa a la Patria, con los brazos abiertos para cobijar a los soldados. La obra, en homenaje a Prefectura Naval Argentina, fue creada por el santafesino Andrés Mirwald. En Avenida de los Italianos y Azucena Villaflor.
Guardacostas. En Avenida de los Italianos y Villaflor. / Maxi Failla
Fuente: Clarín