Buscar huevos ante el peligroso acecho de los dinosaurios. Luchar contra monstruos imaginarios. Sumergirse en la genialidad de Leonardo Da Vinci. Revivir los primeros pasos del hombre en la luna. Estas son algunas de las experiencias que propone la nueva edición de Tecnópolis en su noveno año consecutivo.
La megamuestra de arte, ciencia y tecnología permanecerá abierta hasta el 20 de octubre, pero hasta el 20 de agosto tendrá un horario extendido por las vacaciones de invierno. Abrirá todos los días, de 12 a 20, como siempre, con entrada libre y gratuita. Después del 20 de agosto, sólo abrirá los viernes, sábados, domingos y feriados. Hay estacionamiento gratuito para autos y bicis.
Experimentores, ya un clásico de Tecnópolis.
Tecnópolis iba a ser una megamuestra temporaria, como parte de los festejos por el bicentenario de la Revolución de Mayo. Pero cuando en 2011 encontró su lugar en un predio que alguna vez fue de uso militar en General Paz y Constituyentes, Villa Martelli, llegó para quedarse. Fue un símbolo K pero, en 2016, la gestión macrista decidió seguir adelante con el proyecto. Así, por novena vez, Tecnópolis se convierte en una alternativa con múltiples actividades gratuitas para las vacaciones de invierno.
Tecnópolis ofrece más de 60 espacios con distintas actividades. Foto: Germán García Adrasti
La muestra, organizada por el Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos junto a la Secretaría de Gobierno de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación, ofrece más de 60 espacios con distintas propuestas y actividades.
Una de las novedades de la edición 2019 son las aventuras con realidad aumentada. Para vivirlas hay que subirse a un «trineo», en verdad un triciclo reclinado, y calzarse un casco y controles que registran los gestos y el movimiento. Esa es la llave para pelear con monstruos virtuales o viajar al mundo cretácico. Allí, 145 millones de años atrás, hay que interactuar con dinosaurios y recolectar sus huevos, al mismo tiempo que se explora su hábitat y se evitan los peligros que aparecen.
Este año, el público podrá viajar al mundo cretácico para encontrarse con dinosaurios virtuales.
Además, hay dos muestras que unen la ciencia y la historia. Una de ellas está dedicada a Leonardo Da Vinci, a 500 años de su muerte. La otra, a la llegada del hombre a la luna, un hito que se produjo hace exactamente medio siglo.
La lectura tiene su lugar en la Feria del Libro Infantil y Juvenil Tecnópolis Lee, organizada por la Cámara de Libreros y Editores Independientes (Caledin) del 20 de julio al 4 de agosto.
Pero la agenda incluye conciertos, charlas, talleres, obras de teatro, musicales, marionetas, circo y danza, entre muchas cosas más. Aquí, el cronograma de actividades y espacios:
Tecnópolis: «Furufuhue»
- «Furufuhué, la leyenda del viento». Obra de teatro por la compañía Rompevientos. Tres amigas escuchan hablar de la leyenda de un pájaro cuyo cuerpo está cubierto de escamas de pez. El 24 de julio a las 15.30. El 26, 27, 28 y 29 de julio y el 2 de agosto a las 13. El 3 de agosto a las 18. El 7 de agosto a las 17.30. El 10 de agosto a las 15.30.
- «Contenedor de fábulas». Teatro en pequeño formato para pequeños espectadores. En este espacio se busca que el público infantil conozca e incorpore las moralejas de las fábulas más conocidas. En formato de obras cortas, se representarán las fábulas de: «El león y la zorra», «La hormiga y la cigarra», «El león y el ratón», y «La tortuga y la liebre». Dirección de Víctor Chacón.
Sala Ballena
Tecnópolis: Rapsodia de Animales
- «Rapsodia de Animales». Musical infantil sobre las desventuras de una directora de orquesta (Iara Martina) y su ayudante (Nahuel Quimey Villarreal) en su intento por presentar «El carnaval de los animales», de Camille Saint-Saëns. Del 20 al 10 de agosto, a las 14 y a las 16.
- «Des-Concierto para Orquesta». Una parodia de la obra musical “Guía de orquesta para jóvenes”, creada por el músico inglés Benjamin Britten para mostrar los distintos instrumentos de una orquesta sinfónica. Del 20 al 10 de agosto, a las 15.
- «Patriotas, historia secreta de una revolución». Musical histórico sobre los acontecimientos ocurridos en Buenos Aires entre 1801 y 1810, seguidos desde las mesas del legendario Café de Marco. Escrito por Marisé Monteiro y Manuel González Gil, con música original de Martín Bianchedi. Del 20 al 10 de agosto, a las 17.
Tecnópolis. «Patriotas».
Sala Yaguareté
- «Hilito de un viaje». Una carta de su bisabuela invita a Flora y Alina a emprender un desopilante viaje en hilo, que las obliga a superar desafíos como cruzar un río correntoso o recorrer un laberinto misterioso. Una obra de la compañía «Ligeros de Equipaje». El 6 de agosto a las 18, el 8 de agosto a las 15.30 y el 10 de agosto a las 13.
- «Lo que esconden los libros». Un espectáculo de títeres, objetos de papel, pop-up y clown inspirado en “El gato manchado y la golondrina Sinhá” de Jorge Amado, y en la obra del pintor austríaco F. Hundertwasser. El 24 de julio a las 13 y el 10 de agosto a las 17.
- «Beethoven». La compañía de teatro de títeres Babelteatro recrea la vida Ludwig van Beethoven. Del 23 de julio al 9 de agosto a las 17.
La Nave de la Ciencia. Koufequin. Una banda de rock & pop para chicos y grandes. Miércoles 23 y viernes 25, a las 18.30.
Tecnópolis. Koufequin
Experiencia Creativa. Espacio con espectáculos para todas las edades, entre ellos «El juglar», «Teatro de sombras y monstruos» y «El Circo de Campanita». A las 12.30 y a las 17.30.
Experimentores. Un show de ciencia, con parte de las comprobaciones de experimentos que se visualizan en la serie de TV de Pakapaka. Del 20 de julio al 3 de agosto, a las 14.30 y a las 16.30.
Jardín Encantado. Un jardín vertical cuyas plantas esconden cosas mágicas es el marco para diferentes espectáculos musicales. Como el proyecto «Leyenda de la Yerba Mate», que le da vida a la historia del mate en nuestro país.
Club en Vivo. Un espacio dedicado al entretenimiento, con presentaciones de creadores de contenido digital. Desde el humor, las parodias y la música, los artistas mostrarán por qué su trabajo tienen alto impacto en las redes sociales.
Fuente: Clarín