Las 4 razones detrás de la decisión de Brad Pitt de alejarse de la actuación para ser feliz

La historia de des(amor) con Jennifer Aniston. La que fue la «pareja perfecta de Hollywood» se conoció en una cita a ciegas en 1998 pero fue en el año 2000 cuando decidieron casarse en una ceremonia extremadamente privada en Los Ángeles. Pero todo terminó abruptamente en el 2005, tras más de cuatro años de matrimonio y siete de relación, cuando el actor dejó a la estrella de Friends por su colega Angelina Jolie, de quien se había enamorado perdidamente durante el rodaje de Sr. y Sra. Smith. 

Aunque Aniston citó «diferencias irreconciliables» en su declaración de divorcio apenas unos meses antes del estreno de la película, el affaire de su ex con la hija de Jon Voight ya era sabido. «Queremos explicar que nuestra separación no está motivada por ninguno de los rumores publicados«, señaló la pareja en su anuncio de separación consciente de la noticias sobre la infidelidad por parte de Pitt con su compañera de reparto.

Un mes después de su divorcio de Aniston, un paparazzi retrató a Jolie y Pitt de vacaciones con el hijo adoptivo de Jolie, Maddox, en Kenia, África. Así nació la pareja que la prensa apodó a Brangelina. Tres años después de conocerse, Pitt era el patriarca de un clan familiar de seis hijos, tres biológicos y tres adoptados.

Dejar a la actriz más querida de la televisión no le salió barato. La participación emocional del público en este negado pero luego confirmado romance, que comenzó de forma paralela durante su relación con Aniston, dejó a Pitt en una posición incómoda y siendo blanco de las críticas de los admiradores de Rachel Green.

Tras su ruptura con Jolie, son muchos los quieren que el actor vuelva a ser un hombre feliz y creen que su bienestar está al lado de Aniston. Esa «misión» de la prensa y de los fanáticos de los actores se hizo más fuerte después de que Pitt fuera uno de los invitados a la fiesta del 50 cumpleaños de la actriz en febrero pasado. No obstante, ellos aseguran que no se dieron una segunda oportunidad y que son sólo buenos amigos.

Una cruel separación sin fin y la lucha por sus hijos

Al cumplir diez de relación, Brad Pitt y Angelia Jolie dieron el «sí, quiero» el sábado 23 de agosto de 2014 en el Chateau Miraval, la mágica residencia que la pareja tenía en la Provenza francesa. En la ceremonia fue íntima y sencilla, Jolie lució un espectacular vestido de novia de Versace y un velo decorado con dibujos de sus seis hijos.

En medio de rumores de un posible romance de Pitt con la francesa Marion Cotillard, Jolie sorprendió al mundo al anunciar que se separaba del actor. Ese 19 de septiembre de 2016 fue el principio de una lucha por la custodia de sus hijos que todavía no llegó a su fin y que se fue volviendo cada vez más cruel en los tribunales en medio de acusaciones muy serias.

Personas cercanas aseguraron «Angelina ha estado buscando sangre» en su batalla judicial contra quien fue su pareja por más de 10 años y «quiere matar cualquier relación que tenga con sus hijos».

La ganadora del Oscar, de 44 años, se volvió sumamente protectora de sus hijos y restringió el número de las visitas de su ex marido. Posteriormente, Jolie enturbió aún más las aguas al denunciar que su ex no pagó la pensión alimenticia durante un año y medio.

«Pitt tiene una obligación de pagar la pensión alimenticia. Hasta el momento no ha pagado ningún tipo de pensión significativa desde la separación», indicaba el escrito presentado por la abogada de Jolie, Samantha Bley DeJean, ante una corte de Los Ángeles.

Furioso, el actor negó las acusaciones de su ex pareja y pidió a sus abogados que presentaron documentación a la corte que demostraba que había pagado más de USD 7 millones desde la separación y que le hizo un préstamo millonario a su ex para que pudiera comprar la mansión de Los Ángeles en la que vive actualmente.

Hoy, casi tres años más tarde, siguen peleando por la custodia de Maddox, de 17 años; Pax, de 15; Zahara, de 14, Shiloh, de 12, y los gemelos Vivienne y Knox, de 10.

Investigado por agredir a uno de sus hijos

Pero para el actor lo más duro fue leer en las portadas de todo el mundo que había sido violento con su hijo mayor, Madoxx, a quien le dio su apellido cuando comenzó a salir con la actriz en 2005.

El altercado sucedió en un vuelo privado de París a Los Ángeles. Al parecer,  una acalorada discusión entre el matrimonio llevó a Maddox, el primer hijo adoptado por Jolie, a enfrentarse con Pitt, de entonces de 15 años.Todo apuntó que el actor reaccionó y atacó físicamente al niño, una actitud que habría hecho que la actriz decidiera separarse y alejarlo de sus hijos. Desde ese momento, todo se volvió un drama.

El hecho tomo conocimiento público e intervino el FBI. Dos agentes del organismo entrevistaron Jolie y a sus hijos. Pitt fue señalado como un hombre violento y adicto. Tras una extensa investigación por violencia doméstica, el actor fue sobreseído.Pero el daño ya estaba hecho. Pitt se recluyó en su estudio de Los Ángeles y dedicó su tiempo a su otra gran pasión: la escultura.

Una adicción arruinó todo: «La bebida se convirtió en un problema»

Para Brad Pitt, su separación de Angelia Jolie fue la «muerte«. Así lo confesó el propio actor en su entrevista para la revista GQ Style en mayo de 2017. Sincero y reflexivo, el actor habló de cómo hizo para salir adelante después de perder todo lo más importante en su vida y dijo sentirse responsable de que su matrimonio de diez años se desmoronara.

Pitt admitió que su consumo excesivo de alcohol destruyó el amor con la madre de sus seis hijos. «Estaba tomando demasiado«, declaró a GQ. «Se había convertido en un problema. Y estoy muy feliz de que haya pasado medio año, que ha sido agridulce, pero tengo mis sentimientos en mis manos otra vez«, agregó la estrella.

Consultado sobre las razones que lo motivaron a dejar el alcohol, Pitt respondió que simplemente «no quería vivir más de esa manera». En plena crisis, se sometió a un tratamiento psicológico y dejó de beber para convertirse en un mejor padre.

Pitt también se refirió a la investigación del FBI y de los Servicios Infantiles de Los Ángeles tras el altercado con Maddox, su hijo mayor. «Oí a un abogado decir: ‘Nadie gana en la corte, es sólo cuestión de quién se lastima más’. Y parece ser cierto», declaró en entonces sobre cómo manejaba su divorcio con Jolie, con quien aún hoy no ha llegado a un acuerdo tras casi tres años de la separación.

Y contó también cómo fueron sus días en las semanas posteriores de que su ahora ex mujer pidiera el divorcio. Aseguró que estaba demasiado devastado para regresar a su casa y necesitó escapar. Durmió en el departamento de un amigo durante seis semanas mientras trataba de hacer frente a la pérdida de su familia. «Estaba muy triste, así que me fui».

Fuente: Infobae