Además, aunque ambos géneros musicales comparten su principal rango etario de escuchas, que oscila entre los 35 y 44 años, luego estos se van distanciando: el folclore es escuchado por más jóvenes, mientras que al tango se acercan, siempre en la plataforma, las personas de mayor edad.
En el caso del folclore, la curva ascendente es empujada por canciones románticas de Abel Pintos y Luciano Pereyra, tanto a nivel global como local, sin que aparezcan composiciones clásicas del género como pueden ser las de Los Chalchaleros, José Larralde y Mercedes Sosa, o artistas más jóvenes y con propuestas más testimoniales del estilo de Raly Barrionuevo, Bruno Arias y La Bruja Salguero, premio Revelación del Festival de Cosquín en 2017.
- Mercedes Sosa
Así, el ascenso del folclore dentro de Spotify comenzó en 2014, cuando estaba en el puesto 971 en el mundo, llegando al 759 este año; en el ámbito nacional, en el mismo periodo pasó del puesto 81 al 54.
Las canciones más escuchadas son «Y, ¿Si fuera ella?», «Cien años» y «Oncemil», de Pintos, y «Como tú» y «Quedate conmigo», de Luciano Pereyra, mientras que los artistas más escuchados, después de Pintos y Pereyra, son Mercedes Sosa, Soledad, Los Nocheros, Chaqueño Palavecino, León Gieco, Los Huarya, Los Chalchaleros y Los Manseros Santiagueños.
En cuanto al rango etario, el folclore tiene preponderancia entre los jóvenes, llegando a ser los mayores de 45 años (con excepción de niños y adolescentes) los que menos se inclinan a escucharlo dentro de la plataforma.
En este punto, el tango se encuentra en las antípodas, debido a qué, según los números de Spotify, son los usuarios de edad más avanzada los que prestan sus oídos al género musical que nació en Buenos Aires a comienzos del siglo XX y tuvo su esplendor hasta mediados de ese período.
A nivel global, el ritmo del 2×4 en 2014 estaba en el puesto 993, cayendo al 1239 este año; entre los escuchas argentinos, el tango se ubica en el puesto 271, mientras que cinco años atrás estaba en el 243.
Si bien no hay una conclusión al que el algoritmo de Spotify, el arma secreta con la que cuentan estas plataformas, haga referencia, se puede razonar en que el folclore encontró una vuelta de tuerca con su fusión hacia el pop y la balada, mientras que el tango no logra reinventarse, con excepción del electrónico.
Según los números de la empresa sueca, cuatro de las cinco canciones más escuchadas son de Gotan Project (una de ellas con la participación de Gustavo Cerati), mientras que recién en el puesto seis aparece la versión de Carlos Gardel de «Por una cabeza».
En el top ten también están «Michelle», de Tango Tripping Project, «Mi sueño ideal», de Alberto Castillo» y «Oblivion», de Pablo Ziegler, además de «Last tango in Paris», de Gotan Project.
En cuanto a los artistas más escuchados, ahora sí se abre el juego a otros intérpretes y autores, donde se nota esa falta de recambio para la escucha del género en Spotify: luego de los electrónicos Gotan Project y Bajofondo, están Astor Piazzolla, Gardel, Roberto Goyeneche, Julio Sosa, Juan D’Arienzo y Osvaldo Pugliese, entre otros artistas.
De todas formas, en la comparación de géneros, surge otra similitud, que quizá arroja luz sobre lo que se busca en Spotify: el pop, el dance pop y el rock son los tres géneros más escuchados por quienes ingresan a buscar folclore o tango.