Demi Moore tiene algo de Victoria Beckham: antes de ser de “plástico”, las dos eran muy lindas y les cabía perfectamente el rótulo de sex symbol. Ahora, a los 56 años y algo alejada de las pantallas, la actriz está embarcada en la escritura de sus memorias. Sólo se sabe que el título en inglés será Inside Out ( algo así como “De adentro hacia afuera”). La biografía autorizada estará en las librerías el próximo 24 de septiembre. Quienes tuvieron acceso a los borradores dejaron entrever que su contenido es “desgarradoramente sincero”.
Planeado como un viaje bastante cronológico, ella contará una infancia humilde en Nuevo México, la juventud marcada a fuego por la ausencia paterna (al que nunca conoció) y la inquietante figura del padrastro, un hombre que antes de suicidarse era muy proclive a las mudanzas.
Ah, también hay un capítulo dedicado a la madre alcohólica.
Demi no llegó a terminar la escuela secundaria. Por alguna razón que habrá que leer, ella supo entender que su vida estaba signada por el mundo del espectáculo. De esos días data su primera rehab de drogas.
Promete capítulos y anécdotas dedicados a los romances en continuado y a sus tres matrimonios con el músico Freddy Moore, de 1980 a 1985, con Bruce Willis (1987/2000) y el último con Ashton Kutcher, 2005/13.
Una tal Jennifer Barth, editora ejecutiva de Harper Magazine, anticipó que “es la historia de una mujer que se convierte en una actriz célebre que sólo hace que su viaje de vulnerabilidad, fuerza y autoaceptación tenga mayor repercusión”.
Según Demi, durante años estuvo en espiral, en un camino de autodestrucción constante. “No importan los éxitos que haya tenido, simplemente nunca me he sentido suficientemente buena, suficientemente bien”.
En los últimos tiempos, la célebre figura de Ghost dio un giro importante y cambió sus prioridades. La belleza, acaso “la” clave de su carrera, dejó de ser parte de una naturaleza casi obsesiva, conclusión a la que se llega porque hace rato que sus cirugías estéticas dejaron de ser noticia.
La pelea contra el paso de los años fue reemplazada por un estilo casero centrado en lo familiar: “Mis relaciones personales son más importantes y lo que hago, mi carrera, ocupa un segundo lugar”.
Esto se lo dijo a Gwyneth Paltrow, durante una charla de amigas. De hecho no hay ninguna película de Moore desde 2017. El libro es una promesa pendiente de resolución que cumplirá una década. Lo vine anunciando desde que estaba con Kutcher.