Dos alumnos de escuelas públicas representarán a la Argentina en la Olimpíada Internacional de Filosofía

La Olimpíada Internacional de Filosofía, que se realiza cada año con el apoyo de UNESCO, a través de la Sociedad Internacional de Profesores de Filosofía, contará en esta edición con dos participantes argentinos provenientes de escuelas públicas de nuestro país, que competirán con otros jóvenes provenientes de cuarenta países del mundo.

Los campeones fueron Leticia Chillemi de la E.E.M. Nº 340 «República del Perú» de la Provincia de Santa Fe y Bruno Zárate Scheinsohn del Liceo N°9 de CABA y ellos serán quienes viajarán en mayo a Roma, Italia. Dialogamos con ellos.

Para consagrarse, los ganadores debieron superar la Olimpíada Argentina de Filosofía, que se realizó en 2018. La instancia incluyó preguntas, desarrollo de una tesis y un ensayo en la instancia final, con la apoyatura del pensamiento de referentes de todas las épocas, van desde Aristóteles, Kant, Hegel Dussel y Harari, entre otros.

La competencia surgió en 1997 de la mano del magíster Marcelo Lobosco, director ejecutivo de la Olimpíada Argentina de Filosofía, quien asegura que «ha habido un progresivo interés por la filosofía a lo largo de los años, cada vez con más inscriptos». Y considera que «estos jóvenes representan futuros líderes, que alcanzaron este lugar gracias a sus aptitudes y a sus profesores».

«Significa para mí un importante logro personal, pero, más importante aún, la representación del país y un punto de partida para algo más grande», contó a Infobae Bruno Zárate Scheinsohn. «Estamos hablando de un certamen de nivel internacional. Es sin duda algo de gran magnitud, y la mejor forma de comprenderlo es como un punto de partida para todo lo que venga en mi desarrollo en la filosofía. Como un aprendizaje, podría decirse».

«Es un honor increíble, es sin lugar a dudas el mayor de mis logros hasta el momento», aseguró orgullosa Leticia Chillemi. «Amo la filosofía y me apasiona escribir, así que me siento muy agradecida de haber podido llegar tan lejos haciendo lo que me gusta, y lo que me hace sentir yo misma. Además, ser la representante de la Argentina me hace tener un apego a mi país que, si bien siempre estuvo ahí, definitivamente se intensificó. Creo que haber sido seleccionada es una oportunidad perfecta para seguir aprendiendo, perfeccionándome, conocer personas y expandir mis horizontes».

Ambos contaron que la preparación la realizan en la UBA, de forma de forma presencial y online con la ayuda de tutores de la universidad, quienes les brindan material de lectura y trabajos prácticos para que los envíen vía mail. Una vez por mes aproximadamente tienen encuentros presenciales en Buenos Aires. Y los dos estudiantes comentaron que por su cuenta estudian inglés y hacen cursos de filosofía para perfeccionarse.

– ¿Qué esperan de estas Olimpíadas?

– BZS: Tengo buenas expectativas de la Olimpíada en sí y de mi desempeño en ella. Aunque, obviamente, anticipo una gran dificultad. No podría ser de otra forma igual. Escribí un ensayo en base a una cita en 4 horas, tratando de verter en la medida de lo posible todo el conocimiento filosófico que se posee, fácil no podría ser. Es un desafío que nunca tuve en mi vida, pero sé que de lo que sea resulte, va a generar un crecimiento en mí.

– LC: Lo que espero es que sean una experiencia inolvidable, que me marque como persona y como estudiante. Espero poder dar todo de mí, tal como hice en las instancias anteriores. Sea cual sea el resultado, quiero estar tranquila de que me esforcé lo más posible y sentirme feliz con mi trabajo. También me hace muchísima ilusión conocer a otros jóvenes de tantos países diferentes, con culturas tan variadas y distintas a la mía. Siento que eso va a ser apasionante, nada abre más la cabeza que hablar con gente que vive contextos y situaciones tan lejanos a los de uno. Y, por supuesto, conocer Italia me emociona muchísimo.

– ¿Es la primera vez que viajan a Roma? ¿Qué esperan de este viaje?

– BZS: Muchas cosas espero, más siendo el propósito del viaje tan especial. Además, me fascina el café, y Roma tiene una especial cultura del café, así que aparte del certamen es una de las cosas que más anticipo del viaje. Después, obviamente, el descubrimiento de Roma por mi parte resulta no poco emocionante.

-LC: Tengo muchísimas expectativas para este viaje. Como ya dije, quiero conocer a otros participantes de diferentes países. Me encantan las distintas culturas, los idiomas y además, creo que va a ser genial conocer a otras personas con intereses similares a los míos. También quiero conocer la ciudad, sacar fotos y, sobre todo, disfrutar lo más posible. Aún me cuesta imaginarme allá. Me acuerdo que el día que anunciaron que iba a representar a la Argentina, no terminaba de asimilarlo. Una profesora me dijo que recién iba a ser consciente de ello cuando me subiera al avión. Creo que tenía razón. Esta experiencia es tan intensa y emocionante que a veces siento ganas de pellizcarme para comprobar que no estoy soñando. Me resulta raro recordar todos los pasos que di por este camino y lo lejos que me llevaron. Y aún queda mucho más por recorrer.

Fuente: Infobae.