La apertura fue el martes a las 20 y, luego, se realizan otras siete funciones: el martes 12, miércoles 13, viernes 15, sábado 16, martes 19, miércoles 20 y viernes 22 a las 20 y domingo 17 desde las 17.
El calendario del Teatro Colón tendrá su centro este año en el abono Grandes Intérpretes Nacionales, a partir de mayo (con el director inglés Simon Rattle al frente de la London Symphony Orchestra; la presencia de la mezzosoprano letona Elina Garanca; la visita de la Orquesta Filarmónica de Israel con el director indio Zubin Mehta y la pianista argentina Martha Argerich como solista); por lo que el programa operístico, en contraste obligado por esas inversiones económicas, desplegará un recorrido más austero.
El abono lírico comprenderá ocho títulos: «Rigoletto», de Giuseppe Verdi; «Un tranvía llamado deseo», de André Previn; «Turandot», de Giacomo Puccini; «Ariadna en Naxos», de Richard Strauss, «L´incoronazione di Poppea», de Claudio Monteverdi; «Don Pasquale», de Gaetano Donizetti; «Orfeo & Eurídice», de Christoph Willibald Gluck y «Los cuentos de Hoffmann» de Jacques Offenbach. Habrá, además, tres óperas de cámara.
«Rigoletto», el título de apertura, marca una regularidad en la historia del teatro: fue representado por primera vez en 1908 -el año de la inauguración del actual edificio- y subió a escena en 33 temporadas oficiales. La última de ellas, en 2002.
Se trata de una tradicional ópera en tres actos escrita en 1851 con libreto de Francesco Maria Piave sobre obra teatral «Le Roi S’Amuse» («El rey se divierte») del francés Victor Hugo. Fabián Veloz tendrá el rol protagónico, mientras que Pavel Valuzhin representará al Duque y Ekaterina Siurina será Gilda; todos bajo la dirección del brasileño Maurizio Benini y régie de Jorge Takla, director de origen libanés formado en París.
- Giuseppe Verdi
Verdi convivió con la censura que se desplegó sobre la obra original de Víctor Hugo y debió transigir en una adaptación con bruscos cambios.
- Victor Hugo
Con ese condicionamiento, construyó la trama en torno a un personaje deforme y burlesco y se aproximó a cierta estética del romanticismo francés. El bufón Rigoletto es un individuo que se mueve entre el amor por su inocente hija Gilda y el odio hacia el mujeriego Duque de Mantua y los inescrupulosos cortesanos que lo secundan.
La ópera asume una estructura tradicional y los momentos de tensión con esa estructura, buscados por Verdi, atraviesan a la singularidad del personaje central.
Luego de «Rigoletto», la temporada continuará en mayo con con cuatro funciones de «Un tranvía llamado deseo», una ópera del pianista, director y compositor estadounidense André Previn. Será el estreno argentino de una ópera que protagonizará la argentina Daniela Tabernig en el rol de Blanche Dubois.